lunes, 8 de diciembre de 2008

Hola, me llamo Miller...

...y... si, soy... soy... único. Como mas de uno debeís saber, me trae mas de un problema. Ni mencionar que me encanta ser como soy. ¿Como soy? Pues... Me gustan... Las rosas blancas, por ejemplo, el Hip Hop, pintar miniaturas, ver deportes de motor, hacer deporte en la naturaleza... Ah! Los tattoos! Me encanta ser yo mismo, aunque no siempre puedo serlo. No siempre me dejan. Me gusta hacer feliz a la gente que me importa, y a la gente en general, aunque a veces si debo admitir que hago las cosas pensando en mi mismo, mas que en el resto... Por la experiencia, he podido comprobar que nunca se acuerdan de favores pasados cuando toca devolverlos...


Me gusta ser de utilidad. Pero sigo prefiriendo ser yo mismo. No soy de hablar mucho, por no decir que no hablo nada... Me cuesta mucho cogerle la confianza a la gente, y aún con ella, me cuesta hablar. Suelo dejar días entre cada vez que hablo con alguien para que se sumen las cosas que contar y las ganas de ver o hablar con esa persona... No sé si es lo correcto, pero es como soy. Me cuesta pegarme a una persona. Mucho. Pero hay veces que te dan ganas de no soltar a alguien para siempre. Aunque siempre sea mucho tiempo... No suelo decir cosas bonitas, solo verdades, que es lo que la gente no soporta, aunque todos mientan y siempre digan que si. El mundo quiere ser feliz, y muchas veces que les mientan es la mejor solución... Luego es posible que la mentira caiga en saco roto, pero esa felicidad ya la han tenido. Me pregunto que es mejor... ¿Cien sonrisas y una aterradora realidad, o cien verdades y enterrarte en una realidad que preferirías no haber conocido nunca? Como ya digo... aunque todo el mundo diga que si.


Yo vivo en mi propio mundo de mentiras. Me digo que todo me va a salir bien, que tengo gente que me quiere, y que esperan lo mejor de mi cada día. Que tengo un buen futuro, que todo lo que he pasado queda atrás, y ya no tiene porque cazarme mas. Mucha gente llama a esto mismo "sueños". Yo dejé de tenerlos ya tiempo atrás.


A los que vayan a ser asiduos a estas reuniones: Espero que mis palabras y mi música, en cierto modo, calmen un poco vuestras heridas, vuestra sed de ser más, vuestro dolor tras caer en vuestros intentos fallidos, y que cada vez que acertéis en vuestras vidas, una de mis canciones resuene como banda sonora, una de mis frases suene con vuestra voz, y mis pensamientos sean entendidos, aunque solo sea durante una milésima de segundo... 


Haz lo que tengas que hacer, se un hombre, o una mujer, o los dos, pero vive. Siéntete orgulloso/a de ser quien y como eres. Y cuando lo consigas, solo así serás feliz.